Cuando hablamos de dieta y salud generalmente pensamos en factores como el peso, pero ¿sabías que la salud bucodental también está reñida con lo que comemos y bebemos? En este post te explicamos cómo alimentarte correctamente y el impacto de esa decisión en tu boca.
Qué dieta mejora tu salud bucodental
Más que seguir una dieta específica, lo que hay que hacer es aumentar la ingesta de líquidos y alimentos que mejoran el organismo y disminuir aquello que es perjudicial.
En cuanto a los líquidos podemos hacer las siguientes afirmaciones sin temor a equivocarnos:
- El agua nunca falla. Asegúrate de beber la cantidad suficiente de agua, incluso si no tienes sed. ¿Por qué? Entre otras cosas, porque ayuda a mantener la hidratación de la boca y neutralizar los ácidos dañinos para el esmalte dental.
- Evita el alcohol todo lo posible. Está demostrado que el alcohol tiñe los dientes, favorece el mal aliento y es uno de los factores que aumenta el riesgo de periodontitis. Para conocer más sobre este tema, pincha aquí donde te lo explicamos en mayor profundidad.
- No recomendamos ni los zumos de frutas ni los refrescos o bebidas con azúcar. Todos estos aumentan los niveles de bacterias y, como consecuencia, la posibilidad de sufrir la aparición de caries.
¿Y qué se puede decir de los alimentos sólidos?
Resulta vital tener un buen nivel de calcio que se encuentra en los vegetales de hoja verde, las almendras o los productos lácteos no grasos.
También hay que incluir en la dieta la presencia de la vitamina D pues es imprescindible para absorber ese calcio. ¿Dónde encontrarás esta vitamina de forma natural? En general, en pescados grasos como por ejemplo el salmón o la yema del huevo.
No obstante, todos estos esfuerzos en la dieta deben complementarse con un buen control por parte de tu dentista para tener un diagnóstico específico que satisfaga tus necesidades.
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