Nuestra salud dental es una de las más perjudicadas durante el periodo de fiestas que se acerca. A finales de diciembre comienza el periodo de comidas y cenas copiosas, con muchos excesos.
Sabemos que conocer el impacto de ellos sobre tu cuerpo puede ayudarte a tomar medidas preventivas. Por eso, este artículo tratará sobre ello.
Nuestra salud dental tiene adversarios
En general, cuando rompemos nuestra rutina en periodos de vacaciones, nuestros hábitos comunes son los que más sufren. Eso es lo que ocurre con nuestro cepillado de dientes. Debido a la alteración horaria y a que muchos de esos banquetes son fuera de casa, hay la tendencia a reducir el cepillado. Para que esto no te ocurra, puedes llevar encima siempre un kit de cepillo y dentífrico de viaje. Así podrás combatir a los mayores enemigos de tu boca:
- Alcohol: Muy consumido durante estas fechas en infinidad de bebidas, tanto destiladas como fermentadas, pigmenta tus dientes debido a su contenido en cromógenos, taninos y su acidez.
- Bebidas con gas: Además del alcohol, hay que ser consciente que otras bebidas pueden ser perjudiciales si se consumen en exceso. En el caso de los refrescos, suele haber una composición alta en azúcar. Si sumamos esto al gas, resulta una mezcla que daña el esmalte y puede favorecer la aparición de caries.
- Repostería y otros dulces: Tan habituales como postres o meriendas suculentas, también se caracterizan por contener mucho azúcar, lo que provoca sensibilidad dental y caries. Los niños son los más susceptibles de sufrir daños en sus dientes, pero los efectos son dañinos para todos.
Hay que aclarar que estos 3 enemigos son alimentos habituales en nuestra dieta y que pueden consumirse de forma moderada, pero cuanto más reduzcamos su dosis menos impacto negativo tendrán las fiestas en nuestra salud dental.
¡Esperamos que disfrutes muchísimo de estos días festivos!